jueves, 11 de junio de 2009

La Gloria para Ti mi Dios











Danzándole al Dios Vivo

Que hermoso es adorarte y bendecirte Señor, pués sólo Tú cambiaste nuestro lamento en alabanza y nuestro llanto en gozo.

Alabando al Rey




Cuando la presencia del Señor habita de continuo en y con nosotros, es sólo llegar con un corazón anhelante y agradecido y El abre las puertas de bendición para nuestras vidas.